VECO en evolución: de una ONG belga a una organización internacional en red

VREDESEILANDEN, o VECO (como se le conoce a nivel internacional) se está renovando. A partir del 1 de enero de 2017 nuestra organización se ha sometido a un cambio de estructura organizacional y nos convertiremos en una organización internacional en red. Esta medida se está llevando a cabo para estar mejor preparados y ser más capaces de hacer frente a los desafíos que enfrenta el sector alimentario y la agricultura, ahora y en el futuro.

El mundo ha sido sacudido en su esencia en las últimas décadas. VECO también ha evolucionado mucho en sus enfoques, pero nuestra estructura de organización global ha permanecido prácticamente igual. Durante el último año se ha hecho evidente que tenemos que adaptar nuestros métodos de cooperación entre nuestros colegas de todo el mundo y nuestras organizaciones asociadas, con el fin de aumentar la flexibilidad, incrementar nuestro impacto y tener una perspectiva más internacional. Con este proceso en mente, nuestro nuevo Consejo Internacional ha nombrado a dos directores ejecutivos, Chris Claes y Madeleine Tsimi, para este período de transición para llevar a VECO en su camino hacia convertirse en una efectiva organización en red. Ver artículo completo en inglés, haciendo clic aquí.

Es evidente que los principales desafíos de nuestra era no pueden ser resueltos por el cambio en un solo país o región. Las consecuencias del cambio climático en el sector del arroz, por ejemplo, requieren la colaboración y el intercambio de conocimientos especializados en varias regiones. Además, un número cada vez mayor de empresas multinacionales de alimentos están abordando y participando en temas de sostenibilidad y están buscando la cooperación con organizaciones de agricultores de diferentes regiones. Mientras que algunos de los 14 países en los que trabaja VECO se han convertido en los denominados "países de ingresos medios" (Ecuador, Perú, Vietnam, Indonesia), esto no significa necesariamente que la pobreza general se haya reducido significativamente. En muchos casos, la brecha entre los ricos y los pobres está aumentando, ya que con frecuencia sólo una parte de la población obtiene realmente del crecimiento económico. Las organizaciones de agricultores de estos países están deseosas de participar en las redes mundiales de conocimiento, a menudo necesitando menos apoyo financiero directo en forma de inversión. Su falta de conocimiento puede ser un obstáculo más relevante para el crecimiento que su falta de capital y, es aquí, donde VECO puede intervenir y convertirse en un facilitador de esas redes de conocimiento.

Uno de los valores esenciales de VECO es nuestra creencia en nuestro personal y voluntarios y somos reconocidos por esta mentalidad abierta. VECO es bendecida con experiencias en todas nuestras 8 regiones y en todos los niveles de la organización. Anteriormente, estos expertos habían trabajado principalmente con sus programas regionales y su experiencia raramente se aprovechaba en beneficio de la organización en su conjunto. La nueva organización de red tiene como objetivo abordar este tema y permitirá a estos colegas expertos pasar más tiempo en equipos internacionales que trabajarán a través de las fronteras. Esto podría suceder, por ejemplo, para la promoción del cacao fino en todo el mundo, intercambios entre ciudades sobre cómo alimentar a las poblaciones en auge de manera sostenible y en muchas otras áreas y temas.

Podemos ver que las organizaciones innovadoras se centran mucho más en la creación de redes, el aprendizaje colectivo y el intercambio de conocimientos, la co-creación, la cooperación con socios, el trabajo multidisciplinario y de proyectos. Queremos abordar estos desafíos. Estamos convencidos que, de esta manera, podemos satisfacer mejor las necesidades del presente y el futuro. Donde el conocimiento y la experiencia ya no viajan en una dirección, desde el "mundo occidental" hasta los países en desarrollo, sino que son creados y reforzados mediante el intercambio y la cooperación.

Si bien la organización existente de VECO ya permite una gran participación y aporte de parte del personal y de las organizaciones asociadas, queremos ir un paso más allá. La organización de VECO está actualmente muy centralizada, con los principales órganos de gobierno (Asamblea General, Consejo de Administración y sede) dominados por los belgas. Bajo este modelo, las normas y los objetivos generales del programa para toda la organización se desarrollan centralmente y luego se traducen en programas regionales. Queremos evolucionar hacia una dirección verdaderamente internacional de la organización.

Con este objetivo, VECO establecerá una Fundación de Interés Público, que será administrada por una junta internacional de directores, una junta de afiliados (en la que nuestras oficinas regionales estarán representadas por actores locales e internacionales) y un equipo internacional de gerencia, integrada por los directores de los programas de VECO en las diferentes regiones. Los equipos de proyectos internacionales trabajarán en temas específicos para trabajar en objetivos comunes y compartir conocimientos y la oficina internacional asumirá las funciones de apoyo (finanzas, comunicación, apoyo a los programas, etc.). Por el momento esta oficina tendrá su sede en Bélgica, pero esto puede cambiar, ya que gradualmente contará con el apoyo de colegas de las diferentes regiones de VECO. Nuestro programa en Bélgica se convertirá en una de las oficinas regionales de VECO, al mismo nivel que VECO en la región de los Andes, África Occidental, Indonesia y así sucesivamente.

Actualmente, VECO depende predominantemente de los subsidios del gobierno belga. Otros gobiernos o fundaciones expresaron a menudo el deseo de apoyar nuestros programas directamente, no a través de una entidad legal belga. Por ejemplo, una fundación australiana que quiera financiar nuestro programa en Indonesia podrá transferir su dinero a nuestra oficina en Indonesia. Las normas de información financiera mundial y el control de calidad seguirán siendo garantizados por el departamento de finanzas de la oficina internacional.

• Una organización verdaderamente global con gestión / gobierno internacional.
• 8 oficinas regionales que trabajarán de manera más independiente, compartiendo un ADN común, valores y estrategias de la organización de la red.
• Una estructura organizativa más horizontal, con proyectos internacionales coordinados desde diferentes regiones.
• Colaboración e intercambio más activo entre colegas de todo el mundo.
• Una organización que depende menos del financiamiento del gobierno belga.