“Cuando me preguntan cuáles fueron los efectos de la pandemia les digo que aún no podemos hablar de efectos mientras seguimos atravesando la crisis” dice Yuri Picado, Gerente de la cooperativa cacaotera La Campesina en Nicaragua.
Debido a la crisis los agricultores no están recorriendo las 3 o 4 horas que les toma llegar al mercado municipal de Nueva Guinea o Matiguas, viaje que les asegura la alimentación y productos de la canasta básica - que no producen en las fincas - como algunas hortalizas, granos básicos, productos de higiene, alcohol y... mascarillas.
La Campesina, continúa exportando y vendiendo su cacao, no obstante, a las y los 255 productores socios de la organización les aquejan otros desafíos, cuenta Yuri quien lleva 9 años de trabajar en la cooperativa.
“Empecé como socia con dos manzanas de cacao, luego fui creciendo debido a las oportunidades de capacitación, trabajé como técnica de campo, secretaria, vicepresidenta y ahora llevo 10 meses como gerente, jamás me imagine que me tocaría lidiar con una situación así”.