Existen una serie de factores críticos que las empresas valoran al elegir a un socio comercial proveedor de café. Calidad del grano y en taza, productos a tiempo, precio acorde, son algunos de los elementos que están en la mira de tostadores y exportadores que suelen acercarse a las cooperativas cafetaleras. El motor detrás de este estándar resulta la profesionalización de las organizaciones.
Cada vez son más las cooperativas cafetaleras las que integran protocolos y sistemas de calidad para sus productos y procesos, organizan a profesionales en áreas clave y manejan estrategias para una comunicación fluida con sus clientes. Siendo este el nivel que la industria necesita para empezar una relación de negocios, ¿Cómo ir más allá y generar valor agregado de cara a los mercados internacionales? Te contamos un caso de éxito que recién comienza.
Me gusta la calidad del café de Perú. Catamos en San Ignacio y me gustaron mucho los perfiles, son diferentes a los de otros países. Me gusta que los productores procesen el café en sus fincas y quieran [ofrecer] un buen producto. Elegí trabajar con Aprocassi porque son profesionales.
Cassiopeia es una empresa tostadora de café de especialidad con sede en las Montañas Azules, Australia NSW. Ofrecen café de Kenya, Colombia, Etiopía y Nicaragua, según la estación, en sus tres cafeterías, procurando un negocio que trabaje lado a lado con los productores.
Zac Suito, fundador de Cassiopeia, siempre quiso volver a la tierra de sus padres, Perú. Cuando conoció del trabajo de Rikolto en el país, su interés se renovó con la cartera de organizaciones que trabajaban café y compartían un compromiso con la calidad. Así, decidió pasar un mes en San Ignacio, Cajamarca, durante la temporada de cosecha de café en julio. El objetivo: trabajar de la mano con familias de productores para construir perfiles de un café fantástico.
“Me gusta la calidad del café en Perú. Catamos en San Ignacio y me gustaron mucho los perfiles, que son diferentes de otros países. Me encanta que los productores que procesan el café en las fincas quieran (dar) un buen producto. Yo elegí trabajar con Aprocassi porque son profesionales.”
Desde la primera visita, el equipo de Rikolto guió el reconocimiento de la comunidad y sus principales servicios. A continuación, la empresa Cassiopeia visitó las parcelas para realizar conjuntamente con los profesionales y productores de Aprocassi sesiones de catación y talleres de catación móvil con variedades mundiales de café. Zac tuvo una auténtica semana de convivencia e intercambio con el equipo de Aprocassi, que reafirmó su compromiso de trabajo con la organización. Posteriormente, Lith Montés, Coordinadora de proyectos en Rikolto Perú, tuvo la oportunidad de conocer más de cerca las instalaciones de la organización en Australia, fortaleciendo los lazos comerciales ya creados desde la alianza estratégica.
Rikolto acompañó las visitas en diversos momentos, garantizando que se entiendan las condiciones de los productores, procurando que la co-creación de un café que se vincule a los intereses del mercado y ofrezca un negocio rentable a ambas partes. Asimismo, se compartieron los resultados de las acciones de la alianza Rikolto-Aprocassi que vienen apoyando la consolidación del negocio. Es así como Cassiopeia y Aprocassi idearon la iniciativa “Transparencia y calidad en la cadena de café” , con Rikolto como socio estratégico.
La iniciativa convocará un trabajo de varios profesionales, de la cooperativa y de la empresa tostadora. Con el apoyo de catadores de ambos lados, un barista y los productores, desarrollarán notas de sabor exclusivos para los mercados de Oceanía (Australia, Nueva Zelanda), aprovechando la demanda de cafés especiales. A su vez, las familias diversificarán el café con diferentes procesos de postcosecha. Se privilegiará la incorporación de familias de pequeños productores (de una a tres hectáreas de café), sobre una superficie superior de 1,500 m.s.n.m.
"Desarrollamos un modelo de negocio inclusivo y rentable con pequeños productores. Lo hicimos a través de una marca exclusiva para la empresa, con muy alta calidad en taza (85 puntos). La idea es que las familias dedicadas al café vendan en los próximos años a la tostadoría, involucrando la experiencia de los más adultos y las ideas de los más jóvenes.”
El próximo paso será contar juntos las historias de éxito de familias peruanas caficultoras en Australia y Nueva Zelanda a través de una carta del productor a los mercados internacionales. “Uno de los ejes de trabajo más importantes es la co-creación”, explica Montés. La iniciativa permitirá conservar variedades de cafe silvestre que se encuentran en peligro de extinción.
Desde Rikolto acompañamos los espacios donde empresa y productores se escucharon mutuamente para construir un modelo de negocio que mejore las condiciones de vida en los productores. Respondiendo a la demanda del consumidor y sobre la base de su profesionalización, la organización puede ofrecer una ventaja competitiva al mercado internacional.